Tegucigalpa, Francisco Morazán. En las últimas horas, la Fiscalía Especial de Delitos Contra la Vida (FEDCV) y la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) desarrollaron cuatro allanamientos de morada en el municipio de Marcala, La Paz, en relación a un crimen cometido a inicios del año 2020.

La acción tuvo como objetivo la recolección de indicios en torno al asesinato de Amílcar Granados Ramos, hecho criminal registrado el 17 de marzo de 2020 en la aldea Sigamanes, jurisdicción de Marcala, departamento de La Paz, a 90 kilómetros de la capital.

En ese sentido, agentes del Departamento de Procesamiento de la Escena del Crimen de la ATIC procedieron al decomiso de aparatos celulares, computadoras portátiles y otros dispositivos electrónicos.

De acuerdo a las diligencias efectuadas por agentes del Departamento de Delitos Contra la Vida de la ATIC, el crimen ocurrió cuando la víctima estaba en la aldea en mención hasta donde llegaron a bordo de vehículos los sospechosos que le venían dando seguimiento para abrir fuego en contra de él.

Durante el operativo se logró la detención en flagrancia de Javier Benítez y Janskel Samael Benítez Molina, padre e hijo respectivamente, acusados por los delitos de tenencia de armas de fuego de uso comercial y uso prohibido, incluso al momento de efectuar el allanamiento Javier Benítez abrió fuego en contra de la autoridad pero fue controlado.

En la ejecución de la operación también se hizo el hallazgo de dos millones cuatrocientos treinta y seis ciento once lempiras (Lps. 2,436,111.00), en este caso se contó con el apoyo de elementos de la Policía Militar del Orden Público (PMOP).