Tegucigalpa, Francisco Morazán. La Fiscalía Especial Contra el Crimen Organizado (FESCCO) coordinó una nueva incineración de cocaína, relacionada a cuatro incautaciones que suman 1,437 kilos de cocaína registradas entre agosto y septiembre del presente año, causas por las cuales guardan prisión nueve personas.

Uno de los casos, se registró el 17 de agosto con la incautación por parte de fiscales de la Sección Antidrogas de la FESCCO y la Dirección de Lucha Contra el Narcotráfico (DLCN) de 21 kilos de cocaína y 20 libras de marihuana decomisados en una hacienda en la aldea Corozal de La Ceiba, Atlántida, capturando a Víctor Manuel Lozano Pineda, Fredy Hernán Reyes Sánchez, Oscar Vicente Sánchez Mejía y Ely Zacarías Sánchez Mejía.

Los otros tres casos fueron coordinados por fiscales de la Sección de Investigaciones Sensitivas (SIS) de la FESCCO y la Dirección Nacional Policial Antidrogas (DNPA), corresponden al decomiso de 1,319 kilos de la droga, ejecutado el 28 de agosto en Jutiapa, Atlántida, donde se requirió un vehículo marca Toyota, con registro HEB 9975, que transportaba 53 fardos y que era conducido por Alex Misael Pineda Paz, quien guarda prisión por tráfico de drogas agravado.

El otro decomiso de 64 paquetes, ocurrió el lunes 2 de septiembre en la aldea Las Delicias de El Progreso, Yoro, donde se detuvo a David Efraín Saenz Suazo, Oslin Ariel Cadenas Tábora y Daniela Bonilla López, los procesados fueron requeridos en dos vehículos tipo camionetas, marca Toyota, modelo 4Runner con matrículas HDQ 7371 y HCY 9691, respectivamente, mismos que fueron objeto de inspección encontrándose en compartimientos falsos la evidencia.

Y el último caso, del 6 de septiembre en la aldea Guaymitas de El Progreso, Yoro, cuando fue requerido Luis Mario Galdámez Pacheco quien conducía un vehículo tipo pick up marca Mitsubishi con placas HBB 9914, donde se le encontraron en un compartimiento falso 33 kilos de clorhidrato de cocaína, 21 de esos paquetes tenían la leyenda “Dior” y los restantes 12 forrados con una imagen de una casa.

La incineración se desarrolló en el complejo de la Policía Militar del Orden Público (PMOP) con la participación de Medicina Forense, juzgado con jurisdicción nacional en materia de criminalidad organizada, medio ambiente y corrupción, Cuerpo de Bomberos, Agencia de Regulación Sanitaria (ARSA), entre otras.