Tegucigalpa, Francisco Morazán. – Fiscales de protección a la niñez en el departamento de Olancho, han obtenido dos importantes sentencias condenatorias en contra de dos hombres considerados agresores sexuales de niñas y niños; según el reporte enviado por esta dependencia del Ministerio Público (MP), la primera sentencia fue obtenida en contra de Daniel Duarte Orellana.

Ante la abundante carga de prueba en su contra, Daniel Duarte Orellana fue declarado culpable del delito de violación calificada agravada continuada en perjuicio de un niño; por ello, debe cumplir una pena principal de 23 años, un mes y 10 días de prisión; además, fue declarado culpable del delito de violación calificada agravada continuada en perjuicio de una niña, por lo cual debe cumplir una pena principal de 23 años, un mes y 10 días de prisión.

Por lo anterior, se trata de una pena en total de 46 años, dos meses, 20 días de prisión, más la prohibición de residencia y aproximación a las víctimas por el doble del tiempo de la pena de prisión, más la inhabilitación absoluta, inhabilitación para el ejercicio de la patria potestad responsabilidad civil, libertad vigilada después del cumplimiento de la pena de prisión por 10 años, e inscripción en los libros de agresores sexuales.

Según la investigación criminal, orientada técnica y jurídicamente por los fiscales, el ahora sentenciado aprovechó oportunidades de soledad de las víctimas mientras su madre salía a laborar, los testimonios de los ofendidos refieren que los abusos sexuales se consumaron y que tras ellos el agresor los amenazó para que no hablaran al respecto.

Además, los fiscales probaron que Antonio Juárez Reyes cometió el delito de violación calificada agravada continuada, luego que la investigación de la denuncia respectiva concluyera que Juárez Reyes aprovechaba las salidas a cazar animales y a tareas de agricultura junto al ofendido, un niño de seis años al momento de los hechos, a quien abusó sexualmente.

La fiscalía logró probar los hechos imputados, por ello, Antonio Juárez Reyes debe cumplir una pena principal de 23 años, un mes y diez días de prisión, además la prohibición de residencia y aproximación a la victima por el doble del tiempo de la pena de prisión, la inhabilitación absoluta, inhabilitación para el ejercicio de la patria potestad, responsabilidad civil, libertad vigilada después del cumplimiento de la pena de prisión por diez años, e inscripción en los libros de agresores sexuales.

Los fiscales de ésta localidad reiteran que los abusos sexuales en contra de niños, niñas y adolescentes no quedarán en la impunidad, a la vez que piden a los más vulnerables no guardar silencio y apoyarse en personas de su plena confianza para interponer las denuncias ante la fiscalía.