Tegucigalpa, Francisco Morazán. Tras formalizar acusación por femicidio agravado en audiencia preliminar, la Fiscalía Especial de Delitos Contra la Vida (FEDCV), en equipo con la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC), lograron auto de apertura a juicio en la causa instruida contra el agente de policía, Jarol Rolando Perdomo Sarmiento, acusado por el crimen de la joven Keyla Patricia Martínez Rodríguez.
La resolución la emitió un Juzgado de La Esperanza, Intibucá, que elevó el caso por homicidio simple, no obstante, los fiscales de las Secciones de Investigación de Muertes Cometidas por Miembros de los Cuerpos de Defensa y/o Seguridad, Orden Público o Funcionarios del Estado y de Femicidios de la FEDCV, seguirán sosteniendo en su tesis que el hecho corresponde al tipo penal de femicidio agravado, basado en la presentación de suficientes elementos probatorios indiciarios de la participación de Perdomo Sarmiento.
Este crimen se registró el 7 de febrero de 2021, al interior de una de las tres celdas de la Unidad Departamental Policial Número 10, con sede en La Esperanza, Intibucá.
La ATIC realizó varias de las pesquisas en consonancia con el Manual de Protocolo Latinoamericano de Muerte Violentas de Mujeres socializado por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), por lo que se convierte en el primer y novedoso caso trabajado en ese sentido.
Parte de las pruebas que los fiscales evacuaron, están: la autopsia legal junto a la exposición del médico que la practicó, autopsia psicológica, declaraciones de testigos, prueba documental y la pericia técnica científica expuesta por los expertos forenses, donde se constata la presencia del acusado en la celda donde estaba recluida la víctima durante unos cinco o seis minutos y luego se mantuvo afuera del recinto de forma sospechosa y sin retornar a su posición de asistente del comandante de la estación policial y encargado de las llaves de las bartolinas y custodia de los detenidos.
Los fiscales e investigadores además determinan que existió manipulación en la escena del crimen por parte del mismo policía acusado.
Como se recordará, el MP a través del dictamen de la Dirección General de Medicina Forense reveló en su momento que la causa de muerte de la estudiante de enfermería fue por asfixia mecánica.