Roatán, Islas de la Bahía. – El Juzgado de Letras de Roatán ha dictado auto de formal procesamiento con prisión preventiva en contra de Leonardo Alejandro Johnson Dixon, quien enfrenta graves cargos por asesinato, homicidio y parricidio en su grado de tentativa acabada.

Las acusaciones pesan sobre Johnson Dixon por el brutal asesinato de Isaac Cruz, el homicidio del hijo de este último, identificado como Robert Renald Cruz, y por intento de parricidio contra una señora, según estableció el órgano judicial.

Las investigaciones llevadas a cabo por la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), bajo la dirección técnica y jurídica del Ministerio Público (MP) revelan que el fatídico tres de junio del año 2024, alrededor de las 7:40 de la noche, dos mujeres se encontraban en un bar del centro de Guanaja, en ese mismo lugar estaba presente Isaac Cruz Rankin.

Fue entonces cuando Leonardo Alejandro Johnson Dixon, expareja de una de las mujeres, irrumpió en el local. Sin mediar palabra y empuñando un cuchillo, atacó a Isaac Cruz de manera violenta. A pesar de los intentos de esquivar los mortales golpes, Cruz fue alcanzado y fatalmente herido.

Las dos mujeres presentes en la mesa huyeron despavoridas por un callejón, donde se toparon con el hijo de Isaac Cruz Rankin, Robert Ronald Cruz Jeffers. Este último también fue víctima del violento ataque de Johnson Dixon, resultando mortalmente herido y falleciendo momentos más tarde.

La agresión no se detuvo ahí, ya que el atacante también se ensañó con su expareja, infligiéndole heridas. Afortunadamente, esta última logró refugiarse en una clínica, donde recibió atención médica.

La mujer herida fue posteriormente trasladada a Trujillo, Colón, para recibir atención especializada, y posteriormente remitida a un hospital en La Ceiba, Atlántida.

Al percatarse de que era buscado por los familiares de las víctimas, Johnson Dixon se refugió en la posta policial de la isla de Guanaja, sin embargo, una multitud de personas se congregó en el lugar con la intención de lincharlo. Fue la Fuerza Naval quien finalmente lo trasladó a Roatán, poniéndolo a disposición del Ministerio Público.