Tegucigalpa, Francisco Morazán. La Sección Antisecuestros y Operaciones Especiales de la Fiscalía Especial Contra el Crimen Organizado (FESCCO), presentó tres recursos de amparo ante la Corte de Apelaciones con jurisdicción nacional, contra resoluciones emitidas por el juzgado de letras con competencia nacional en materia penal de criminalidad organizada y corrupción, en la causa instruida a tres presuntos secuestradores.

Se trata del proceso en contra de Ernesto Amador Galindo, Gustavo Adolfo Ordóñez Escoto y José Adonay Rivera Pérez, acusados por el delito de secuestro agravado en perjuicio de Mario Antonio Velásquez Galeas; en el caso del primer imputado, también se le acusa de lavado de activos y porte ilegal de armas.

La resolución fue emitida en fecha 3 de octubre de 2023, luego que el Ministerio Público solicitara ampliar diligencias investigativas con control jurisdiccional en contra de otros imputados al tratarse de un secuestro agravado, sin embargo el juez decretó sin lugar la pretensión de la fiscalía, pese a estar dentro del tiempo para realizar esas indagaciones.

A criterio del juez, no podía ordenar más diligencias en virtud que la defensa había interpuesto un recurso de apelación, mientras tanto el MP considera que el hecho que exista una apelación no excluye que se puedan efectuar más indagaciones.

El arresto de los acusados se ejecutó el sábado 2 de septiembre de 2023, encontrándoseles en poder de dos armas de fuego, dos vehículos, 10 teléfonos celulares de diferentes marcas y modelos y más de 1.7 millones de lempiras (L.1,797,500.00).

Los agentes de la Unidad Nacional Antisecuestros (UNAS), en coordinación con los fiscales, efectuaron allanamiento de morada con autorización judicial en diferentes sectores del Distrito Central. Uno de los sujetos es residente de la aldea San Matías y dos en la colonia Cerro Grande de Tegucigalpa.

La investigación establece que los tres sospechosos, el 12 de agosto de 2023, secuestraron a un joven capitalino, por quien exigían 15 millones de lempiras a cambio de dejarlo en libertad, no obstante, se presume que en una fosa clandestina que se logró ubicar habrían enterrado a la víctima.

De momento, dos exhumaciones cadavéricas coordinadas con Medicina Forense se practicaron y se está a la espera de la plena identificación de los cuerpos descubiertos.