Tegucigalpa. Francisco Morazán. La Fiscalía Especial para el Enjuiciamiento de Funcionarios y Servidores del Sector Justicia (FEEFS-SJ), en audiencia de lectura de fallo, obtuvo una pena de 16 años seis meses de reclusión en la causa instruida contra el policía Gerson Javier García Pavón por dos delitos de falsificación de documentos públicos y un delito de falso testimonio.
Además, se ordenó una inhabilitación absoluta de cinco años seis meses.
Según consta en la descripción de los hechos del requerimiento fiscal, en fecha 4 de mayo del año 2017, el agente policial le dio detención a los señores Matías Guardado y Gregorio Guardado en el municipio de Lepaera, departamento de Lempira.
Dicho arresto lo efectuó tras recibir una denuncia de amenazas, empero, a la hora de elaborar las actas de registro personal y de decomiso de un arma que tenía en posesión el imputado Gregorio Guardado, el policía García Pavón aseveró falazmente que a quien le había encontrado el arma de fuera era a Matías Guardado.
Luego, durante la audiencia inicial de ambos encausados, cuando se le tomó declaración al policía, éste siguió sosteniendo el hecho falso que el arma se la decomisó a Matías Guardado y no a Gregorio Guardado.
Contrario sensu, producto de las diligencias periciales de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC), se comprobó que el uniformado había faltado a la verdad en cuanto a la narración de los hechos en las actas, pues en un mensaje de WhatsApp éste manifestó que incriminó en el delito de portación ilegal de armas a Matías Guardado porque él era el que estaba molestando (usando una palabra soez) en Lepaera.
Lo anterior, causó una afectación al ciudadano Matías Guardado puesto que por un tiempo se le mantuvo con prisión preventiva por el delito de portación ilegal de armas, ilícito en el que realidad nunca incurrió.