Tegucigalpa, Francisco Morazán. – En el transcurso de la “Operación Némesis VI”, la Fiscalía Especial de Medio Ambiente (FEMA), recibió la información que en una propiedad de La Esperanza, Intibucá, tenían dos monos de la especie Capuchino, por tanto se procedió a realizar una inspección para posteriormente rescatarlos con el acompañamiento de personal del Instituto de Conservación Forestal (ICF).
Luego de ello, se realizó la misma acción en Marcala, La Paz, en donde se rescató un mono de la especie araña, luego de realizar los respectivos trámites administrativos fue entregado al “Centro de Rescate Fecunda”, ubicado en El Zamorano, al oriente del Distrito Central.
Asimismo, se realizó una inspección sobre una supuesta contaminación ambiental en una colonia residencial ubicada a pocos kilómetros de Valle de Ángeles; por el mismo delito se inspeccionó una empresa dedicada a la fabricación de concreto ubicada a inmediaciones de la vía rápida que conduce del Loarque a la altura de la Corte Suprema de Justicia.
Por otro lado, se presentó requerimiento fiscal contra Arístides González Nolasco, jefe de la Unidad Municipal Ambiental de Santa Ana, Francisco Morazán por supuestamente cometer el delito de responsabilidad de funcionario o empleado público.
De acuerdo a lo investigado, el funcionario autorizó permiso para la apertura de una calle, función que no le correspondía ya que eso le concierne a otra secretaría de Estado.
En otro caso, tras recibir una denuncia, personeros de la FEMA en compañía de personal de la Alcaldía Municipal del Distrito Central (A.M.D.C.), inspeccionaron un botadero clandestino de basura a la altura del lugar conocido como El Tablón, a varios kilómetros luego de las instalaciones de la Universidad Tecnológica Centroamericana (UNITEC).